Qué es el branding o imagen de marca

El poder de la imagen de marca

¿Te has parado alguna vez a pensar qué es lo que hace que consumas una marca y no otras? ¿Por qué algunas marcas se vuelven más distinguidas que sus competidores? La respuesta no es sencilla. Cada marca tiene su personalidad propia y cada consumidor puede tener una percepción subjetiva sobre ella, al igual que nos pasa con las personas. Es muy difícil generalizar cuales son las claves que hacen que una marca sea recordada. 

¿A qué llamamos imagen de marca? Una marca no es el logo, ni el slogan, ni el packaging, ni la publicidad. Pero a la vez lo es todo. La imagen de marca es todo aquello que pueden decir o pensar los consumidores de una empresa. 

¿Qué es el branding? 

Todo el trabajo que hay detrás de la creación de una marca se llama Branding. El objetivo de este proceso es actuar sobre la identidad de esta para mejorar su percepción en las mentes de los consumidores y favorecer su diferenciación. Para conseguir esto se debe trabajar en todos los aspectos relacionados con la marca: el logotipo, los valores que la marca intenta transmitir, el target o público objetivo, el nombre, el posicionamiento… Cada detalle cuenta. 

La esencia del branding se encuentra en centrar el esfuerzo que el cliente se emocione. Debemos adentrarnos en la neuroquímica del cerebro del usuario para hacerlo sentir. En un mundo en el que hay un sinfín de oportunidades de compra, lo complicado es sorprender al consumidor, hacerle saber que nuestra marca está hecha para él. Este es el principal objetivo de la imagen de marca. 

Una marca ha realizado una buena estrategia de branding si consigue que las personas, como consumidores, asociemos principalmente el producto/bien a la marca. Este es el caso de Coca-Cola, la cual ha logrado o que se sustituya el nombre “bebida de cola” por el de la propia marca. Lo mismo pasa con Kleenex, Barbie o LEGO, marcas que han calado tanto en las vidas de los consumidores que han llegado a introducirse hasta lo más hondo de su lenguaje, llegando a eliminar el uso de palabras como “pañuelo de papel” o “juguetes de bloques de construcción”, siendo sustituidas por su nombre comercial. 

Otras empresas, como Google, prefieren realizar una estrategia de Employer Branding, mediante la cual intentan transmitir la imagen de marca a través de sus trabajadores. La empresa da a sus trabajadores unas condiciones inmejorables, recibiendo a cambio unos embajadores de marca excepcionales. 

Y no podemos olvidar el concepto Personal Branding que toma tanta importancia en la actualidad en el aspecto profesional. Crear una marca personal para diferenciarse del resto es necesario para encontrar trabajo o abrir el abanico de oportunidades para crecer profesionalmente.  

infografía qué es el branding

La marca para generar engagement 

 Generar engagement significa crear una vinculación entre el cliente y la marca. Para que un consumidor sienta lo necesario para que surja el engagement debemos transmitirle fidelidad, confianza, pertenencia y experiencias.  Hemos de conseguir que el consumidor perciba la marca como algo humanizado, algo que le aporta valor y que le provoca sentimientos positivos. 

En un momento en el que el e-commerce aumenta cada vez más, es esencial que las marcas estimulen la compra en establecimientos reales. Si conseguimos que el consumidor viva el momento de compra como una experiencia y no como una mera transacción, estaremos ganando puntos cruciales. Mejorar la Customer Experience (la opinión que tiene sobre nuestra organización un cliente tras realizar una compra) es esencial para las estrategias de venta y para la identidad de la marca.  

Los consumidores cada vez son más exigentes y más conscientes de que, en un momento de compraventa, se merecen todo lo que pueden imaginar. Ellos son el centro, y las empresas han de estar al nivel. El branding es un proceso de seducción: hay que situar al cliente en el punto de mira, conquistarlo, y demostrarle lealtad.